viernes, 31 de enero de 2014

¿SE NOTAN LAS ESTACIONES EN EL FONDO DEL MAR?

El calor y el frío no solo influyen en los seres que viven en las superficies terrestre y marina, sino que también causan un efecto importante en los que habitan los fondos oceánicos. No obstante, en el agua los cambios tardan más en notarse, debido a que en este medio la temperatura se modifica menos y de forma más lenta que en tierra, lo que retarda el avance de las estaciones oceánicas.

Sin embargo, durante el invierno y el verano, las grandes diferencias térmicas entre la superficie y el fondo hacen que se formen capas acuosas que no se mezclan entre sí, debido a su distinta densidad. En estas épocas, los nutrientes quedan atrapados cerca del fondo, donde no llega la luz. En cambio, en los periodos más templados de primavera y otoño las aguas vuelven a mezclarse, y el alimento abunda en la superficie, lo que, junto con la luz solar, permite a las algas que forman el fitoplancton –los microorganismos que hacen la fotosíntesis– crecer tan rápidamente como sus vecinas terrestres.

También con la subida de la temperatura del agua, algunas especies, como las medusas "se vienen arriba" y su presencia es notoria. Cuando abundan, es señal de que ha habido un ascenso térmico. El aumento de las temperaturas oceánicas también está afectando a la biodiversidad de los mares.

lunes, 27 de enero de 2014

TAL COMO ÉRAMOS.

Un castellano de hace 7.000 años, moreno con ojos azules.
Leer el artículo completo en EL MUNDO de 27 enero 2014

Todo comenzó con un recorte de prensa. Julio Manuel Vidal Encinas, arqueólogo provincial de León, tuvo que enterarse el 20 de noviembre de 2006 del hallazgo de un esqueleto humano -aparentemente de la Edad de Bronce- por la portada de La Crónica-EL MUNDO de León. El experto solicitó a los Juzgados de Instrucción de León -que, naturalmente, abrieron diligencias por si se trataba de un hecho criminal actual- que le dejaran acompañar a la Guardia Civil en la primera visita a la cueva de la La Braña por mandato judicial. Y se lo permitieron.
Pero para cuando se produjo, los excursionistas -pertenecientes a un grupo de parapente que se dedicaba al excursionismo o la espeleología cuando hacía mal tiempo- ya habían acudido multitud de veces al lugar del hallazgo, moviendo los huesos e incluso se habían fotografiado, y colgado las imágenes en internet, sosteniendo la calavera en la mano.
«Es lamentable, pero en arqueología los hallazgos casi siempre son casuales y estas cosas suceden», cuenta Vidal Encinas. «Yo entré con la Policía en aquella primera visita, pero no me hicieron falta más de 15 segundos para darme cuenta de que ellos estaban allí perdiendo el tiempo», cuenta. Uno de los primeros signos de la antigüedad que percibió el arqueólogo fue la formación de una pequeña estalagmita sobre una costilla de uno de los dos cuerpos encontrados.
El equipo del que se rodeó el arqueólogo provincial de León llevó a cabo el estudio antropológico, el análisis isotópico de la paleodieta de estos individuos e incluso la interpretación de los colmillos atrofiados de ciervo que usaban como adornos en sus ropas. «Pero éramos escépticos acerca de que se pudiera llevar a cabo el análisis de ADN tan contaminado», reconoce Vidal Encinas. Sin embargo, el avance de las técnicas para descifrar secuencias genéticas antiguas -las que han permitido secuenciar recientemente el genoma de uno de los homínidos de Atapuerca, de 400.000 años- lo ha hecho posible.
La piel oscura de estos cazadores recolectores proviene de las variantes genéticas africanas para este caracte
La piel oscura de estos cazadores recolectores proviene de las variantes genéticas africanas para este caracter«Es lamentable, pero en arqueología los hallazgos casi siempre son casuales y estas cosas suceden», cuenta Vidal Encinas. «Yo entré con la Policía en aquella primera visita, pero no me hicieron falta más de 15 segundos para darme cuenta de que ellos estaban allí perdiendo el tiempo», cuenta. Uno de los primeros signos de la antigüedad que percibió el arqueólogo fue la formación de una pequeña estalagmita sobre una costilla de uno de los dos cuerpos encontrados. Las sospechas de Vidal Encinas fueron corroboradas por las dataciones: ambos individuos rondan los 7.000 años de antigüedad, es decir, pertenecen al Mesolítico.
El equipo del que se rodeó el arqueólogo provincial de León llevó a cabo el estudio antropológico, el análisis isotópico de la paleodieta de estos individuos e incluso la interpretación de los colmillos atrofiados de ciervo que usaban como adornos en sus ropas. «Pero éramos escépticos acerca de que se pudiera llevar a cabo el análisis de ADN tan contaminado», reconoce Vidal Encinas. Sin embargo, el avance de las técnicas para descifrar secuencias genéticas antiguas -las que han permitido secuenciar recientemente el genoma de uno de los homínidos de Atapuerca, de 400.000 años- lo ha hecho posible.
Los restos fueron manipulados por quienes los hallaron e incluso llegaron a fotografiarse con el cráneo en la mano
Ahora, casi ocho años después del hallazgo, una investigación dirigida por Carles Lalueza-Fox, uno de los mayores expertos mundiales en ADN antiguo, acaba de presentar lo que se ha convertido en el primer análisis del ADN completo de un cazador recolector europeo del Mesolítico, antes de la aparición de la agricultura en las sociedades humanas.
El trabajo, publicado hoy en la revista Nature, ha permitido a los investigadores revelar que estos hombres prehistóricos tenían un aspecto físico -un fenotipo- que no existe en la actualidad en toda Europa, dominado por una piel muy morena y ojos de color azul. La recreación realizada por el equipo científico (y que acompaña esta página) es prudente con la tonalidad de piel porque, según aseguran los propios autores, no pueden saber el tono exacto. El color de piel de este cazador recolector está determinado por la versión africana de los genes que determinan la piel clara en los europeos actuales.

lunes, 13 de enero de 2014

La nave espacial Kepler descubre cinco nuevos planetas rocosos

El equipo midió la oscilación del reflejo de la estrella anfitriona causada por el tirón gravitacional que, sobre ella, ejerce el planeta en órbita
La nave espacial Kepler ha hallado cinco nuevos planetas rocosos entre una serie de mundos que también han sido encontrados recientemente por la prolífica sonda de la NASA.La agencia espacial estadounidense ha explicado, durante la reunión de la Sociedad Astronómica Americana, que los planetas varían en tamaño, desde un 10 hasta un 80 por ciento más grandes que la Tierra. Para llevar a cabo este hallazgo y obtener datos de los planetas, se han realizado observaciones de seguimiento con mediciones Doppler de las estrellas anfitrionas de los planetas.El equipo midió la oscilación del reflejo de la estrella anfitriona causada por el tirón gravitacional que, sobre ella, ejerce el planeta en órbita. Esta observación revela la masa del planeta: cuanto mayor es la masa del planeta mayor es la atracción gravitatoria y, por tanto, mayor será el tambaleo."Esta maravillosa avalancha de información sobre planetas nos habla de su estructura de núcleo y su envoltura", ha señalado uno de los autores del trabajo, Geoff Marcy. "Ahora nos enfrentamos a preguntas desalentadoras acerca de cómo se forman estos mundos y por qué el Sistema Solar está desprovisto de algunos de los elementos más comunes en la galaxia", ha apuntado.Así, ha destacado que de dos de los nuevos mundos rocosos, denominados Kepler-99b y Kepler-406b, ya se sabe que son un 40 por ciento más grande en tamaño que la Tierra y que tienen una densidad similar al plomo. Ambos orbitan su estrella en menos de cinco y tres días, respectivamente, por lo que, según los investigadores, son demasiado calientes para sostener la vida tal y como se conoce.En este sentido, ha explicado que las mediciones de densidad dictan la composición química posible de los planetas extraños. De este modo, saben que los más pequeños tienen un núcleo rocoso y que las proporciones de hidrógeno o helio, entre otros componentes, varían dramáticamente.La NASA espera ahora, 'armada' con esta información, poder convertir la fracción de estrellas que albergan planetas tamaños en la fracción de estrellas que albergan planetas rocosos. "Y eso es un paso más cerca de encontrar un entorno habitable más allá del Sistema Solar", ha concluido Marcy.

miércoles, 8 de enero de 2014

PROGRAMA EN DISCOVERY MAX Asedio al castillo con Dan Snow

Castillo de Gibralfaro
En 1487, el puerto musulmán de Málaga fue atacado por las fuerzas cristianas de la Reconquista. ¿Lograron los altos muros del Castillo de Gibralfaro proteger a este imperio?
‘Asedio al castillo’ es la nueva serie de Discovery MAX en la que de la mano del afamado Dan Snow conoceremos las fortificaciones medievales más inexpugnables y legendarias
La serie arranca el próximo jueves 9 de enero a las 23.30 h con el ‘asedio’ al castillo de Gibralfaro, en Málaga
Fortificaciones inquebrantables, baluartes de leyenda y huellas de un pasado caballeresco. Discovery MAX comienza el año descubriendo las edificaciones que durante siglos han sobrevivido a guerras, asaltos y hambrunas en ‘Asedio al castillo’, una nueva serie que explora las fortalezas medievales más inexpugnables del mundo. A partir del 9 de enero, cada jueves a las 23.30 h, el experto en Historia Dan Snow nos propone viajar en el tiempo para explorar la ingeniería militar y las huellas de las batallas legendarias que se encuentran tras los muros de fortalezas como el Castillo de Dover en Inglaterra, Krak des Chevaliers en Siria, Malbork Castle en Polonia y el Castillo de Gibralfaro en España.
Entre piedras e historia, las fortalezas de ‘Asedio al castillo’ desvelan ante los espectadores de Discovery MAX todos sus secretos en una lección de historia en la que sabremos cómo vivían y morían los habitantes de las fortificaciones más emblemáticas de uno de los periodos de la historia más enigmáticos y evocadores. Durante la Edad Media, estas estructuras fortificadas eran la autoridad máxima en aquellos territorios que dominaban. Con carácter defensivo y ofensivo, los castillos eran centros de administración, símbolos de poder y concentración de poder militar. En cada episodio de la serie conoceremos cómo funcionaban sus entramados y Snow analizará que factores convirtieron esos castillos en construcciones infranqueables ante los ataques enemigos.
A través de material de archivo, localizaciones in situ y efectos visuales de contenido didáctico, esta serie de seis episodios revela la sangrienta historia que esconden estas fortificaciones, buceando en las armas que hicieron posible la victoria y analizando en detalle aquellas batallas que cambiaron el curso de la historia. Cada episodio culminará con la última prueba de la fuerza de cada castillo: el examen de la épica batalla que cambió el curso de la historia.
PRIMERA PARADA: MÁLAGA
La serie arranca con un episodio de excepción que nos traslada a la ciudad de Málaga para conocer la historia del castillo de Gibralfaro, el enclave de pasado fenicio que el califa omeya Abderramán III eligió para la construcción de fortaleza y que el rey nazarita Yusuf I convirtió en alcázar. Dan Snow explorará el glorioso pasado de esta edificación que cobró especial relevancia cuando fue objeto de un fuerte asedio por parte de los Reyes Católicos en el verano de 1487. Tras el asedio, Fernando el Católico lo tomó como residencia, mientras que Isabel I de Castilla optaba por vivir en la ciudad. En manos de la Corona de Castilla, el castillo de Gibralfaro sirvió para albergar a las tropas y proteger la Alcazaba en los asedios, labor que cumplió con gran fidelidad debido a las posibilidades que ofrecía el cerro sobre el que está construido para el cuerpo de artillería.

JAPÓN SIGUE ASESINANDO BALLENAS

Desde luego que esta foto no deja indiferente a nadie. Una ONG, Sea Sepherd, ha denunciado el asesinato de cuatro ballenas a manos de una flota de balleneros japoneses en un denominado "santuario" de ballenas. La organización difundió un vídeo en el que se ve a tres ballenas sobre la cubierta de uno de los barcos y a una cuarta siendo despedazada en un acto cruel. En la imagen se observa la mancha de sangre dejada por estos cetáceos en la cubierta de uno de los balleneros.

martes, 7 de enero de 2014

MÁLAGA, VIEJA PERO MODERNÍSIMA

Fundada por los fenicios en el siglo VIII a. C., lo que la convierte en una de las ciudades más antiguas de Europa, Málaga fue un municipio primero federado y luego de derecho latino del Imperio romano, y una próspera medina andalusí cuatro veces capital de su propio reino, que fue incorporada a la Corona de Castilla en 1487. Durante el siglo XIX la ciudad experimentó una destacable actividad industrial y revolucionaria que la situó como primera ciudad industrial de España y la hicieron merecedora de los títulos «Siempre denodada» y «La primera en el peligro de la libertad».
Escenario de uno de los episodios más sangrientos de la Guerra Civil Española y protagonista de la explosión del boom turístico de las décadas de 1960 y 1970, Málaga constituye en la actualidad un progresista centro económico y cultural, la capital económicamente más activa del sur y un importante nodo de comunicaciones en el litoral alboranés

viernes, 3 de enero de 2014

La historia secreta del guerrero fenicio localizado en Málaga

El hallazgo de una tumba monumental de los siglos VII-VI a. C. en un solar del casco urbano abre grandes perspectivas de investigación al tratarse de un elemento "único" en Málaga y "casi en la Península"

Todo empezó con un control de movimiento de tierras en una parcela de grandes dimensiones que atraviesa las calles Jinetes y Refino en pleno centro histórico de la capital malagueña. La construcción de cuatro plantas subterráneas de aparcamientos motivó en principio esta vigilancia arqueológica que posteriormente ha sacado a la luz un «elemento único en Málaga» y «casi en la Península», que llevaba oculto siglos y siglos por toneladas de tierra.
Después de encontrar restos medievales relacionados con esta zona, pertenecientes al denominado Arrabal de Fontanalla, los arqueólogos de Arqueosur, contratados por la empresa constructora Aldesa construcciones, localizaron a un huésped inesperado. El arqueólogo David García, director de la excavación, explica que encontraron restos de una tumba monumental de sillares en «muy buen estado de conservación» de los siglos VII-VI a. C. (periodo orientalizante). «Pensamos que por sus características y por la buena calidad de los materiales no se trataba de una tumba corriente y que era una estructura antigua», detalla.
Por su parte, el esqueleto apareció en muy mal estado de conservación, pero sí los elementos que le acompañaban refuerzan la hipótesis que puede tratarse de un guerrero, un militar o un príncipe de la época.
Los arqueólogos han hallado gran cantidad de bronces junto a los restos del difunto, muy fragmentados y difícil de adivinar qué fue antes de fragmentarse (escudo, coraza, pechera...). En el fondo de la tumba ha salido a la luz el ajuar relacionado con el fallecido (varias piezas de plata como un plato, un sello con un motivo egipcio, un recipiente de cerámica y la punta de una lanza, doblada en su extremo, siguiendo la costumbre de la época para que no pudiera volverse a usar). En la cabecera de la tumba apareció un casco oculto por piedras, que han tenido que engarzarlo totalmente para garantizar su consolidación.
Ahora son muchas las preguntas que responder y unas perspectivas de investigación «enormes» la que se han abierto con esta excavación. Según los arqueólogos, los análisis en el laboratorio tendrán que dar respuesta a cuestiones como el origen de este individuo: fenicio, griego, indígena... Y la singularidad de esta tumba, de su ocupante y el lugar en que se ubica, porque en opinión de estos expertos, no existe información de estas características de este periodo histórico en concreto. Para ello se realizarán estudios antropológicos, de ADN, de isótopos, de hábitos alimenticios, de carbono 14... Un proceso de analíticas para arrojar luz sobre todas las hipótesis abiertas en esta excavación malagueña, que ha estado coordinada por el departamento de arqueología de la Gerencia de Urbanismo y de la delegación de Cultura de la Junta de Andalucía.
Tendrá una sala en el museo de Málaga
La gran calidad y la singularidad de esta tumba monumental de los siglos VII-VI a. C. aparecida en el casco histórico merecen que tenga una sala en el futuro Museo de Málaga en el Palacio de la Aduana. Así lo confirma otro de los arqueólogos de Arqueosur, Alberto Cumpián, que avanza que esta estructura funeraria se extraerá del subsuelo, se almacenará y posteriormente se instalará en una sala dedicada ex profeso a este descubrimiento en la pinacoteca malagueña.