Los grupos de oposición municipal de Málaga y los dos quintacolumnistas junteros pretenden obligarnos a tragarnos el tranvía, y siguen llamándolo ”metro” aunque saben que no lo es.
El argentino, cuya ambición confesa es ser algún dia alcalde, sabe que nunca lo será, porque su propio partido desmiente su honorabilidad, decencia y lealtad a Málaga, puesto que Rivera sostiene a Susana, que defrauda, miente y jode a Málaga cuanto está en su… mano,. Este argentino sabe de sobra que en Buenos Aires el subte es subte, los colectivos, colectivos y los trenes, trenes. Habría un cachondeo indescriptible si un político proyectase un tranvía por la calle Santa Fe y lo llamase “metro”. Cuando se trata de hacerse la foto junto al alcalde, este argentino es gobierno; pero cuando sueña el sueño imposible de la vara de mando, se alía con quienes no paran de atentar contra Málaga.
Los argentinos, como todo el mundo, saben que un metro no puede competir con el tráfico de coches. Sería estúpido. Si a un neoyorquino le dijeran que van a hacer un “metro” para eliminar el tráfico de coches en la Tercera avenida, se armaría la rebuína.
Susana Díaz, que no para de mentir en Málaga (piensen en el asunto del SAS: “•la junta mantendrá todos los servicios del SAS en verano”, resultando que no, como ayer se supo). Susana, como el consejero amenazador, todo su “equipo´” y la burrocracia de psoìstas pueblerinos, cuentan con el pasotismo malagueño y por eso nos engañan, nos mienten, nos desprecian, nos defraudan y nos mantienen los últimos siendo los primeros en aportación de impuestos. Cualquier otra ciudad con la dimensión e importancia de Málaga, presentaría denuncias judiciales constantes contra la junta, pero aquí, los líderes se aguantan y no nos lideran y los partidos, callan por si algún día tienen posibilidad de mandar allì.
TANTO EL ARGENTINO COMO LA VERDADERA OPOSICIÓN, DEBEN SABER QUE, LEGAL Y LÓGICAMENTE, UN TRANVÍA NO ES UN METRO Y POR LO TANTO EL ACUERDO NO PUEDE ESTAR VIGENTE.
Necesitamos ser conscientes de que el tranvía de Susana estropeará la calle Hilera y malogrará las calles Santa Elena, Eugenio Gross y Blas de Lezo. Quien diga otra cosa, MIENTE.
Aviados estamos. Viendo lo que vemos, cabe la posibilidad de la que la junta jamás acabe el metro de Málaga. Es probable que los malagueños la echemos mucho antes.
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